sábado, 22 de agosto de 2009

Sentido


Solo se que esa tarde sali sin sentido, y encontre uno, junto a tu camino, que caminaremos juntos.

Tal vez no exista nada mejor que sentarse una tarde de lluvia, con buena musica acompañando, a pensar, tal vez el reventar las bolsas de aire de las bolsas si sea bastante bueno, o un baño de espuma, pero para mi, la lluvia me sirve para llegar a lo mas inhospito de mi pensamiento.

Sentado en el marco de la ventana de mi tercer piso, observo como el agua cae por efecto de la gravedad, pequeñas gotas que entre si, en un par de horas, dejaran las calles de la ciudad casi inservibles. Como de a poco la tierra ávida de agua sacía su sed, como los vehiculos apresurados corren por la carretera levantando agua en su andar, como las aves corren buscando un refugio donde su plumaje no se vea afectado por la lluvia. Pero yo al contrario de todo, lo veo como un pequeño milagro natural, mi mente se transporta con ella. El sentido de la vida, las cosas que llegan y se van, las cosas que te confunden, las cosas que llena una vida. Recuerdos que me atrapan, de manera cálida. El olor de los cerezos humedos traen a mi mente el día en que nuestros caminos se cruzaron, de una manera tan accidental, pero todo con un sentido...

Fue un tarde parecida a esta, sólo que salí a emprender una busqueda a lo desconocido, no sabía que me faltaba en mi vida, sólo se que salí a buscarlo. Tu tambien estabas en una busqueda, solo que de algo mas tangible, abrigo, un sweater, un nuevo poleron. Yo solo recuerdo que deje que mis locos pies me guiaran sin rumbo pensado, que el azar fuera mi navegador, que me llevara a los mas deconocido que me rodeaba. El cielo nublado no quería perderse este acontecimiento, tampoco el sol que a ratos estaba escondido tras una capa de nubes, se asomo entre algunas nubes pidiendo permiso para no perderse nada. Asi todo llega a un punto en que mis pies solo eran ente de la inercia, y mi mirada al suelo o al mar de gente que me rodeaba no encontraba nada. Solo veo un par de ojos azules que se reflejan en los mios. Mi andar sin presunto sentido me llevo a chocar con un poste, solo atine a cerrar mis ojos, para despues de abrirlos encontrar ese par de ojos mas cerca, y darme cuenta que pertenecían a la mirada mas encantadora del mundo. Mayor fue mi sorpresa al ver que esa mirada también podía hablar, con un tono angelical. "...¿Tan fuerte fue mi golpe que llegue al paraíso?..." Solo tu mirada de preocupación y un "...¿Estas bien?..." me hizo entrar en razon, y darme cuenta que mi busqueda había terminado; pero por qué?... Simple, no sentí esa necesidad de años de buscar aquello desconocido, ya la había encontrado. Sólo un "...si...estoy bien..." de mi parte te devolvio esa sonrisa reprimida por la preocupación. Un par de locas gotas, querían ver mas de cerca todo esto, pero solo supieron lo que fue estallar en l suelo, las demás, para no ser menos, las siguieron, y tu decidiste compartir tu paraguas, yo nunca uso, pero sólo se que dije si a tu invitación. Sólo respondí a todo con un cálido abrazo que se volvio eterno.

Salí esa tarde sin un sentido alguno, y encontre un sentido a la vida, a tu lado todo se hizo mas claro, no hubo confusiones, solo un largo camino que recorrer.

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