lunes, 4 de enero de 2010

Mi primera noche contigo.


"...nuestros cuerpos danzaron de placer sobre una nube y nuestras manos recorrieron la ruta del deseo..."

Nuestras risas alocadas se dejaban escuchar en el auto. No podía soltar tu mano ni tu la mía, nuestra mirada nos decía “No me dejes, quiero estar esta noche contigo”. Pasamos a tu casa, y botamos una planta, no se rompió nada, pero si quedo la tierra esparcida, pero que importaba, nosotros solo nos dejamos guiar por nuestros besos. Besos apasionados donde perdíamos el aliento a menudo, tus manos buscaban mi cuerpo entre la oscuridad, mientras las mías en tu cintura te apretaba contra mi.

No se como pero seguimos camino entre la oscuridad, sin que nuestras bocas se separan hasta llegar a tu habitación. La luz dio paso a un nuevo ambiente, donde podíamos vernos fijamente, donde nos deseábamos aun más, y donde solo éramos tú y yo.

Estiras tus brazos sobre mi, y yo sin impedimento te despojo de ropas y caemos en una nube donde entre cojines nos miraban los peluches de nuestros aniversarios de pololeo. Tus manos se enredan en mis ropas y como por arte de magia desaparecen por los costados, la luz comienza a bajar, y nos dejamos llevar por el placer, y la luz ahora tenue de la lámpara de tu velador nos invitaba a jugar sensualmente con nuestros cuerpos, nosotros, tu y yo, sobre una nube, y nuestra imaginación llevaba por la pasión.

Mi boca comienza a recorrer tu cuerpo, mientras juegas con mi cabello yo beso tus pechos. Nuestros cuerpos desnudos comienzan a danzar en la tenue luz de ambiente, mientras tus manos me mueven al ritmo de tus caderas me aferro firme a tus piernas, mientras tus gemidos llenan el ambiente húmedo del roce de neutros cuerpos en esa noche.

No hay comentarios:

Publicar un comentario